Como en cualquier sitio, la ciudad de Málaga también posee sus símbolos distintivos que la diferencian de otras ciudades. En concreto, la flor que representa a la ciudad de la Costa del sol es la biznaga. Una planta que solo conocen los malagueños, pero, aunque sea desconocida, enamora a cualquiera gracias a su indiscutible belleza y a su arrebatador aroma.
Si te das un paseo por la Calle Larios, los alrededores de la Catedral de Málaga o de la Encarnación, o la plaza de las flores en la que se encuentra el exclusivo gastrobar Kraken, destacable por sus exquisitas tapas, seguro que te encontrarás a los biznagueros, que son las personas que venden unos preciosos ramilletes de jazmines clavados en pencos secos, formando una estructura semiesférica. Pues estas flores son las biznagas.
Las biznagas son tan características que el premio que se otorga en el Festival de Málaga de Cine Español, se llama ‘’Biznaga de oro’’, e incluso existe una estatua en honor a los biznagueros que se encuentra en los Jardines de Pedro Luis Alonso, muy cerca de la playa la Malagueta.
Que la biznaga sea considerada la flor malagueña no es casualidad, como todo tiene su origen y la historia de Málaga. En este post te contaremos como esta flor se convirtió en el símbolo de la ciudad y la figura del biznaguero.
Origen de la biznaga
La biznaga no es una flor que nazca, por así decirlo. A diferencia de otras flores, como las rosas o las margaritas, la biznaga se hace. Es una obra de arte creada por los biznagueros que consiste en colocar cuidadosamente uno a uno jazmines hasta formar una especie de ramo.
El origen de la biznaga se remonta al pasado árabe malagueño (Al-Andalus), de hecho, el término Biznaga es un concepto árabe, que significa ‘’regalo de Dios’’. Este ramillete nació con el fin de ahuyentar mosquitos, ya que a pesar de que su dulce aroma encandila a cualquiera, para los mosquitos no es tan agradable.
Hoy en día se utiliza más para decorar, aunque sigue habiendo malagueños que siempre tienen una biznaga en la mesita de noche para que no se le acerque ni un solo mosquito.
El biznaguero de Málaga
El biznaguero es un vendedor ambulante de biznagas. Esto es un trabajo que lleva existiendo durante siglos en la ciudad de Málaga, que ha ido pasando de generación en generación y es considerado un negocio familiar.
Como en todos los trabajos de cara al público, los biznagueros también tienen su propio uniforme. Este consiste en una camisa blanca, pantalón negro, faja roja y unas alpargatas.
Para que podamos disfrutar de las biznagas y de su dulce aroma durante las noches de verano, los biznagueros comienzan la faena desde finales de invierno. Recogen los tallos de nerdo, los limpian para que solo quede el tallo y los dejan al aire libre, mientras que esperan a que florezcan los jazmines en verano, para posteriormente insertarlos uno a uno sobre el tallo. Si además de satisfacer tu olfato, quieres deleitar el gusto, entonces acércate al restaurante Pez Wanda y prueba sus arroces, ¡No querrás probar otros!
El pico más alto para los biznagueros es la Feria de Málaga, donde las biznagas se convierten en protagonistas en los vestidos y trajes de los malagueños y turistas.
En definitiva, si vas a visitar Málaga próximamente no te olvides de fijarte en los biznagueros y comprar tu propia biznaga para decorar y aromatizar tu casa con esta preciosa flor única.